SALUD Y CALIDAD
DEL AIRE INTERIOR (CAI)

Una buena CAI implica un ambiente libre de contaminantes y con condiciones adecuadas de temperatura, humedad y ventilación.

 Factores que influyen en la CAI

1. Presencia de contaminantes

  • Físicos: Las partículas como el polvo, polen o fibras suelen ser contaminantes.
  • Biológicos: Las bacterias, virus, moho y esporas son partículas que pueden circular en el ambiente o en nuestro alrededor

2. Ventilación

Tener una ventilación adecuada ayuda a eliminar contaminantes, renovar el aire y mantener un entorno saludable. Espacios cerrados con poca circulación de aire pueden acumular sustancias perjudiciales.

3. Condiciones del ambiente

Aspectos como la temperatura, la humedad relativa y el movimiento del aire también son clave para la percepción del confort y para prevenir problemas respiratorios o de salud.

 Consecuencias de una mala calidad del aire interior

Una CAI deficiente puede generar:

  • Irritación en ojos, nariz o garganta.
  • Problemas respiratorios como asma o alergias.
  • Fatiga, dolores de cabeza, mareos o falta de concentración.
  • Mayor riesgo de enfermedades infecciosas en espacios mal ventilados (como el COVID-19).
  • En casos extremos, podría contribuir al desarrollo de enfermedades crónicas o cardiovasculares.

 Impacto del aire acondicionado en la CAI

 Efectos positivos

  • Filtrado del aire: Los sistemas con buenos filtros pueden atrapar polvo, alérgenos y partículas.
  • Control térmico: Mantiene el confort térmico en climas extremos.

 Efectos negativos

  • Acumulación de contaminantes: Si el sistema no se limpia adecuadamente, puede alojar hongos, bacterias y polvo.

Cómo mejorar la calidad del aire interior

1. Reducir las fuentes de contaminación

  • Evitar fumar en interiores.
  • Usar productos de limpieza con baja emisión de químicos.
  • Seleccionar materiales de construcción y muebles con bajo contenido de COV.

2. Mejorar la ventilación

  • Abrir ventanas regularmente o instalar sistemas de ventilación controlada (como los recuperadores de calor).
  • Asegurar circulación de aire fresco en todo el espacio.

3. Mantener la limpieza

  • Aspirar y limpiar el polvo con frecuencia.
  • Lavar cortinas, alfombras y textiles que puedan retener alérgenos.

4. Revisar y mantener sistemas HVAC

  • Cambiar o limpiar los filtros del aire acondicionado cada 1–2 meses.
  • Hacer limpieza profesional del equipo al menos una vez al año.

5. Monitorear la calidad del aire

  • Utilizar sensores o contratar servicios especializados para analizar la calidad del aire.

Relación entre CAI y salud

  • Reduce las ausencias laborales o escolares por enfermedades respiratorias.
  • Disminuye la frecuencia de hospitalizaciones por asma y alergias.

 Consejos adicionales

Evitar el uso excesivo de ambientadores o aerosoles: Pueden liberar COV y afectar la CAI.